Hace unos días me tope en el canal retro TCM con una pequeña joya de la cinematografía musical yanqui. No veía La Tiendita del Horror (Little Shop of Horrors) desde hace por lo menos 15 años. Recuerdo que en mis tiernos años de escolar también veía esporadicamente los capítulos de la serie animada basada en este film. Se trata de una versión para la pantalla grande del musical homónimo de Broadway, que a su vez esta basado en la película de Clase B (casi Z) de 1960 llamada The Little Shop of Horrors (o sea, casi el mismo nombre), solo que la versión original no es un musical, aunque igualmente es considerada un clásico hoy en día y de vez en cuando se la puede ver en canales como Moviecity Classics.
¿COMO VIENE LA MANO?: Seymour (Rick Moranis) es un joven que trabaja en una florería ubicada en los barrios bajos que no es capaz de vender una margarita ni en el día de la madre. Esta enamorado en secreto de su compañera de trabajo Audrey (Ellen Greene), una atractiva mujer con voz de pito y graves problemas de personalidad y un claro complejo de inferioridad latente. Audrey tiene de pareja a Orin (Steve Martin), un sádico hijo de re mil que la caga a palos en todo momento y goza tremendamente causándole dolor a la gente, es tanto el placer que le produce ver sufrir a los demás que decidió ser dentista de profesión. Un día, durante un eclipse de Sol, Seymour encuentra una extraña planta de una especie desconocida a la que decide cuidar y llamar Audrey II. Desde el momento en que Seymour coloca este raro espécimen en exhibición la suerte de la florería da un giro de 180 grados y los clientes comienzan a llover, lo que hace de Seymour una especie de celebridad local. Las cosas se ponen raras cuando descubre que la planta se alimenta de sangre y no de otros minerales, por lo que el joven decide alimentarla dándole a chupar su propia sangre del dedo indice. Todo se complica cuando la planta comienza a crecer y la sangre de Seymour ya no le basta. A estas alturas el vegetal ya habla y le pide a su dueño que lo alimente a toda costa, necesita sangre y tiene que ser fresca... y de humano. Obviamente Seymour que es mas bueno que el agua es incapaz de matar a alguien, pero Audrey II lo convence de que hay gente que se merece ser asesinada.